jueves, 5 de febrero de 2009

El poder de la mente

Subir los peldaños con miedo, paso por paso.

Cargar con el temor de no hacerlo bien

Recorrer un pasadizo lleno de dudas e inseguridades.

Divisar aquel objeto brillante en la estancia

Y saber que de él depende tu futuro.


Lo que esperé para este momento

Lo que pasé para conseguirlo

Y ahora que lo tengo, tan sólo a 10 segundos

Me asusta tanto que quiero gritar

Pero como en los sueños, mi boca no coordina con mi voz

Y no se escucha ni el viento.


Le repito una y otra vez

"No dejes que me venza, ayúdame a resistir"


Cierro los ojos y mi mente titubea entre salir corriendo

o seguir el ritmo de la situación


Mi corazón se decide por escuchar

esa tonada que suena en el ambiente

Y se deja llevar por la dulce melodía

Dulce, pero a la vez amarga

Que habla sobre…

¡No otra vez! Los nervios me traicionan de nuevo.


Por favor, no dejes que me venza


Mi turno está por llegar

y mi memoria decidió dormirse

Falta un segundo

y de la nada, la mente me devuelve la voz

La memoria despierta de su corto sueño

Las palabras comienzan a fluir


¡Pero él no se va!

¿Qué más quiere de mí?


La música fluye a través de mi ser

y yo me transformo en otra persona

En ese otro “yo” que sólo la música puede revelar.

Y por fin se va.

Aquel sentimiento oscuro se rinde y acepta que la batalla, la vencí yo.


Mis ojos se abren

y se acostumbran a esta atmósfera conocida

Una sonrisa cruza mi cara, pero solo un momento

pues es otro sentimiento el que se trata en la melodía.


Una puerta se aparece

y aprovecho la oportunidad

Encierro al miedo, la inseguridad, los nervios

y le doy la bienvenida a quien soy en verdad

Le doy una vuelta a la perilla, y la llave se desintegra en mi mente


Simplemente ya no están.


Me preparo para el final

Tiene que ser la mejor parte

Respiro, guardo el aire en mis pulmones

y termino la canción de la mejor manera que se me ocurre.


"Coz in your eyes I’d like to stay”♪


Doy las gracias y me retiro.

Gracias a él también, que me demuestra que sí puedo ser mejor.

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